Quedó inaugurado el Centro Cultural Paseo Córdoba de la Nueva Andalucía
Quedó inaugurado el Centro Cultural Paseo Córdoba de la Nueva Andalucía
Esta mañana se inauguró el nuevo Centro Cultural de la UNC, Paseo Córdoba de la Nueva Andalucía. Se trata de un conjunto edilicio sobre la esquina de Duarte Quirós y Obispo Trejo. La obra, de relevante envergadura, fue proyectada e inspeccionada por la Subsecretaría de Planeamiento Físico de la UNC bajo lineamientos nacionales e internacionales de rescate del patrimonio cultural. Además de un moderno edificio pensado para la realización de eventos culturales y académicos, se destaca el Museo de Sitio, ideado con el propósito de interpretar el patrimonio de la Orden Jesuita que habitó este espacio, la evolución histórica del sitio y los posteriores procesos de intervención. (27.07.2022)
La Universidad Nacional de Córdoba abrió las puertas del Centro Cultural de la UNC, Paseo Córdoba de la Nueva Andalucía. Se trata de un particular conjunto edilicio en pleno casco céntrico de Córdoba, en la esquina de las calles Duarte Quirós y Obispo Trejo.
La obra completa, cuyo proyecto integral cuenta con la aprobación de la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos, representa una muestra cabal de la evolución de la arquitectura en Córdoba ya que consta de tres construcciones de distintas épocas: el antiguo Refectorio o comedor jesuítico, que data del siglo XVIII, un edificio del siglo XIX, donde funcionó el antiguo Instituto Técnico Universitario (ITU), y un flamante edificio de características más modernas.
De este modo, la UNC contará con un centro cultural de más de 3000 metros cuadrados, un auditorio para la realización de múltiples eventos, una plaza arqueológica y un museo de sitio. Además, en conjunto con la Municipalidad de Córdoba, se construyó un paseo peatonal que permite disfrutar y aprovechar el conjunto edilicio.
Este espacio cultural de inmenso valor patrimonial permitirá disfrutar a los cordobeses y cordobesas, como a quienes llegan de visita, de un sitio de gran valor arquitectónico, histórico, turístico y recreativo. En pocos metros se encontrarán con edificaciones y vestigios de diferentes siglos, constituyendo una experiencia única y singular en nuestra ciudad.
Acto inaugural
Ante una numerosa audiencia, el rector de la UNC, Hugo Juri, fue el encargado de la apertura del evento, además de oficiar de anfitrión invitando a los y las presentes a una recorrida por el edificio.
Juri destacó el proceso de trabajo que implicó esta obra y agradeció especialmente al equipo de la secretaría de Planificación Institucional Estratégica, a cargo de Ian Dutari, por haberse “puesto al hombro” la importante tarea.
Asimismo, aprovechó la oportunidad para remarcar que fue durante el mandato de la ex rectora Carolina Scotto, quien estuvo presente en la ceremonia, cuando se planificó la realización del Centro Cultural. Además, agradeció el apoyo y trabajo conjunto con el gobierno de Córdoba, la municipalidad y el gobierno nacional.
“Hace apenas unos días pudimos inaugurar Campus Norte, una obra que implica futuro, que apunta a una universidad con mirada actual. Hoy tenemos el orgullo de abrir las puertas de este sitio que nos reencuentra con un pasado histórico fundamental para Córdoba y que, de algún modo, renueva nuestras tradiciones”, afirmó el rector.
A su turno, el intendente de la ciudad de Córdoba, Martín Llaryora, felicitó al rector Juri y a todos los equipos de trabajo de la Casa de Trejo implicados en esta obra y subrayó la importancia de poder continuar con trabajos y procesos iniciados por gestiones anteriores.
“El hecho de que hoy estemos celebrando la inauguración de un espacio que inició una gestión y pudo concluirlo otra nos debe llenar de orgullo y hay que destacarlo una y otra vez, porque se trata del camino que siempre deberíamos seguir”, ponderó el intendente.
Respecto a la envergadura de la obra, Llaryora aplaudió la posibilidad que se abre para reforzar la tradición: “Nos encontramos aquí fortaleciendo una tradición no solo tangible, sino también intangible, porque el legado jesuita es parte del ADN cordobés. Sin dudas sigue vigente su impronta, su herencia, sus enseñanzas, pero que exista un lugar más para rememorarlo es sin dudas una grandísima noticia”, aseguró Llaryora.
Presentes
En la ceremonia inaugural estuvieron presentes, además del rector de la UNC, Hugo Juri, y el intendente de Córdoba, Martín Llaryora, la ex rectora Carolina Scotto; el vicerrector Pedro Yanzi Ferreira; el rector electo, Jhon Boretto; la vicerrectora electa Mariela Marchisio; el titular del área de Planificación Institucional Ian Dutari; el secretario de Extensión Universitaria Conrado Storani, entre otras autoridades de la UNC.
Además, también participaron el arzobispo de Córdoba, Ángel Rossi; rectores y rectoras de otras universidades; miembros del Superior Tribunal de Justicia; ministros y ministras del gobierno provincial.
Un Museo de Sitio para interpretar el patrimonio
La esquina donde se localiza el Centro Cultural de la UNC reviste muchísima importancia ya que forma parte del patrimonio jesuita, al integrar la serie de conjuntos Manzana y Estancias jesuíticas de Córdoba, declaradas Patrimonio de la Humanidad por UNESCO en el año 2000.
Además, fueron tan numerosos los hallazgos arqueológicos durante los distintos estratos de las excavaciones científicas que se decidió el armado de un Museo de Sitio que conjugue un monumento y un área arqueológica.
El objeto es revalorizar el legado de los Jesuitas, los materiales y sistemas de construcción utilizados por esta Orden y los procesos productivos, sociales y culturales que impulsaron desde sus orígenes.
Asimismo, se pretende dar cuenta de la superposición a través de 500 años de un convento urbano, vivienda, biblioteca, e instituto universitario.
Entre los numerosos hallazgos, se encontraron en buen estado de conservación cimientos, partes de muros y bóvedas hacia el sur de la calle Duarte Quirós, diseñados por los jesuitas.
Estos muros, junto a las vigas de madera originales del Antiguo Refectorio Jesuítico que podrán apreciarse en el recorrido museístico, son las piezas más antiguas descubiertas hasta el momento y datan del año 1650 aproximadamente (Siglo XVII).
Los sectores identificados abarcan parte del Patio de la Botica del conjunto jesuítico de Córdoba, el Refectorio (comedor) y posiblemente otros sectores de trabajo hacia el sureste, donde se registran las permanencias más antiguas, todas ligadas a las áreas de trabajo y servicio de la Orden.
La singularidad e importancia del Refectorio radica en que se trata del último espacio en el que los hermanos de la Orden convivieron cuando fueron detenidos en 1767, y desde el cual partieron hacia su expulsión del territorio americano.
Para poder conocer en su totalidad toda la riqueza cultural del lugar, se instalaron pasarelas sobre la plaza arqueológica desde las cuales las y los visitantes podrán no sólo apreciar los muros y pisos, sino también el trabajo de arqueólogos y arqueólogas que continuarán en el lugar.
El trabajo interdisciplinario que implicó la obra
A partir del año 2016 la Subsecretaría de Planeamiento Físico de la UNC proyectó y ejecutó el Plan Integral de Intervención, que abarcó el Refectorio Jesuítico, el edificio ex ITU y el nuevo edificio del Centro Cultural UNC.
El trabajo implicó estudios con georradares para la demarcación de las zonas a excavar, además de numerosas herramientas y materiales, así como una minuciosa tarea de relevamiento, restauración, cálculo estructural y completamiento de obra.
Fueron numerosísimos los y las profesionales y especialistas que formaron parte de este proyecto, que pretende aportar a la interpretación del conjunto jesuítico de Córdoba, como bien cultural de la comunidad local y como recurso cultural turístico de jerarquía internacional.
Arquitectos/as, historiadores/as, biólogos/as, restauradores/as, especialistas en patrimonio y un equipo de arqueólogos y arqueólogas coordinados por el área de Arqueología de la provincia de Córdoba, fueron quienes tuvieron a cargo el avance de los trabajos en el área de intervención con la intención llevar al espacio público las huellas arquitectónicas jesuíticas.