Crean un atlas con imágenes de alimentos para optimizar los tratamientos de personas con disfagia

Un equipo de investigadores de la Escuela de Nutrición de la Universidad Nacional de Córdoba desarrolló un Atlas fotográfico de consistencias de alimentos. La herramienta facilitará el trabajo integral en los tratamientos de personas con disfagia, un trastorno que genera dificultades para la deglución. El atlas fue validado para el uso clínico y está disponible en su versión digital para toda la comunidad. [15.03.2020]

La disfagia se caracteriza por la dificultad de trasladar el alimento desde la boca hasta el estómago. Algunos de sus síntomas son la incapacidad para preparar el bolo alimenticio, un babeo excesivo, atragantamiento, tos, sensación de obstrucción del alimento y dolor al tragar.

Es un trastorno en la deglución con distintos grados de severidad. Desde algo menor que se resuelve modificando los alimentos que se consumen cotidianamente,hasta casos extremos donde es necesario cambiar hasta los líquidos que el paciente bebe.

Para mejorar los tratamientos de estos cuadros, investigadoras de la Escuela de Nutrición de la Universidad Nacional de Córdoba crearon un Atlas fotográfico de consistencia de alimentos. Su versión final incluye siete consistencias de alimentos, tres de líquidos espesados y un grupo de alimentos que suponen un riesgo a broncoaspiración.

“Las consistencias se basaron en las clasificaciones propuestas por la Dieta Nacional de Disfagia de los Estados Unidos, el Sistema de clasificación de habilidades para comer y beber (EDACS) –dirigida a población con parálisis cerebral–, y la Iniciativa internacional de estandarización de la dieta para la disfagia,la más reciente de todas, publicada en 2017”, explicó Sofía Luciano.

“La dificultad en los tratamientos con personas con disfagia es la brecha entre lo que dicen los profesionales y lo que comprenden, y luego hacen los familiares y cuidadores. Las indicaciones técnicas y cómo se comunican suelen ser difíciles de asimilar, por eso generamos esta herramienta, para unificar un lenguaje y presentarlo de una manera simple”, destaca María Pilar Rodríguez Marco, una de las autoras.

El atlas incluye las clasificaciones de consistencias de alimentos y de líquidos espesados, cada una junto a imágenes representativas, una breve explicación y otros ejemplos. En el caso de los líquidos, se explica además cómo conseguir la consistencia mediante suplementos alimentarios terapéuticos.

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